Salud
¿Qué hago si no pueda extraer mi copa menstrual?
Dic
Hoy respondemos a una de las preguntas que más miedo os da cuando comenzáis a utilizar la copa menstrual que es poneros nerviosas, contraer involuntariamente los músculos de la zona pélvica y no poder sacar la copa menstrual.
Lo primero de todo es ¡tranquila! Que no cunda el pánica porque sacarla es muy sencillo pero para ello primero hay que relajarse y no tensar esa zona.
Las causas más frecuentes por las que te suceda ésto, son las siguientes:
No estás todavía acostumbrada a su funcionamiento y necesitas algo más de experiencia insertándola y extrayéndola. Con un poco de tiempo ya no tendrás ningún problema pero como todo en la vida, hay que aprender.
La falta de relajación es otro de los motivos principales porque si nuestro cuerpo no está en calma, los músculos vaginales estarán en tensión y será imposible extraer con facilidad la copa; es más, notarás molestias al tirar de ella.
Puede también que la propia copa se hay descolocado en el interior por varios motivos: que no la hayas insertado correctamente o que estés utilizando una talla que no es la adecuada para ti.
A veces la copa se puede subir más de la cuenta por el propio movimiento aunque suele ser poco habitual ya que están diseñadas para que se mantengan estables en el mismo sitio.
Ahora bien, para extraerla en cualquiera de estos caso:
Relájate y coge una postura que sea cómoda para quitarte la copa menstrual. Una de ellas es la de poner un pie en algo, sentarse en la taza del váter o también de cuclillas; la elección dependerá de cada mujer.
Después hay que buscar el tirador con los dedos.
Si aún así, siguieras sin tocarla, es hora de empujar un poco con los músculos de la vagina hacia afuera para que la copa menstrual baje. Es un movimiento muy sencillo que además como mujeres debemos reforzar si no queremos tener las famosas pérdidas de orina y tener un suelo pélvico debilitado.
Ahora mueve un poco la copa con los dedos para tirar hacia fuera de ella.
Asíq ue no te preocupes si alguna vez te sucede ésto porque es cuestión de tiempo que cojas la práctica necesaria ya que una vez que le has pillado «el secreto» no volverás a utilizar compresas o tampones debido a su comodidad y todas sus ventajas.
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